¿Qué carallo pasa por la calle?
Ya ves, me permito plagiar una de las muchas paranoias que los Siniestro soltaban en sus conciertos por que estoy ya un poco harto de los clásicos saludos, y puestos a innovar que inventen ellos, que se decía en el suelo patrio no hace tanto tiempo.
Bien, hecha la introducción, excesiva por otra parte, vamos a lo que vamos. Nuestros pareceres son tan parecidos a veces que el juego de discutir exige de una lucidez mental que no se si poseerás ya (yo por supuesto si, como sabrás si has leído mi artículo semanal del kuaderno) pero como tu dices lo sabíamos antes de empezar y sin embargo aceptamos el reto, y sarna con gusto...
Bueno, está claro que el imperio decae, lo vengo manteniendo desde hace años y fijé su caída y descalabro total para mediados de los años 20, (lástima que Bush no pueda ser reelegido sino el proceso se abreviaría rapidamente) y el fuelle, que tampoco ha sido tan deslumbrante como el de imperios pasados, es evidente que tiene una fuga y gorda. Tienes razón, huyamos del tópico del yankee gordo y analfabeto, algunos son sólo analfabetos por que su metabolismo es rápido y no engordan jajajaja. Y con respecto al genuino americano, se llamará como quiera (si es que queda un último mohicano aún) pero algunos de sus antecesores (los indios cris del Canadá) dijeron: "Cuando hayáis talado el último árbol, cuando hayáis matado el último animal, cuando hayáis contaminado el último río, os daréis cuenta de que el dinero no se come" Y esto y la carta del indio Seatle - "[...] Soy un salvaje y no comprendo otro modo de vida. He visto a miles de búfalos pudriéndose en las praderas, muertos a tiros por el hombre blanco desde un tren en marcha. Soy un salvaje y no comprendo cómo una máquina humeante puede importar más que el búfalo al que nosotros matamos sólo para sobrevivir[...]"- en 1854 a Frankli Pierce (a la sazón presidente de EEUU) es todo lo que un americano del norte de verdad ha dado como contribución al acervo cultural mundial.
Recojo el guante de tus recomendaciones como si fueran propias por supuesto y te emplazo para la próxima, aunque seguramente el tema se extenderá esta noche en el pub con unas birras de por medio.
Sin más:
El Lobezno
Ya ves, me permito plagiar una de las muchas paranoias que los Siniestro soltaban en sus conciertos por que estoy ya un poco harto de los clásicos saludos, y puestos a innovar que inventen ellos, que se decía en el suelo patrio no hace tanto tiempo.
Bien, hecha la introducción, excesiva por otra parte, vamos a lo que vamos. Nuestros pareceres son tan parecidos a veces que el juego de discutir exige de una lucidez mental que no se si poseerás ya (yo por supuesto si, como sabrás si has leído mi artículo semanal del kuaderno) pero como tu dices lo sabíamos antes de empezar y sin embargo aceptamos el reto, y sarna con gusto...
Bueno, está claro que el imperio decae, lo vengo manteniendo desde hace años y fijé su caída y descalabro total para mediados de los años 20, (lástima que Bush no pueda ser reelegido sino el proceso se abreviaría rapidamente) y el fuelle, que tampoco ha sido tan deslumbrante como el de imperios pasados, es evidente que tiene una fuga y gorda. Tienes razón, huyamos del tópico del yankee gordo y analfabeto, algunos son sólo analfabetos por que su metabolismo es rápido y no engordan jajajaja. Y con respecto al genuino americano, se llamará como quiera (si es que queda un último mohicano aún) pero algunos de sus antecesores (los indios cris del Canadá) dijeron: "Cuando hayáis talado el último árbol, cuando hayáis matado el último animal, cuando hayáis contaminado el último río, os daréis cuenta de que el dinero no se come" Y esto y la carta del indio Seatle - "[...] Soy un salvaje y no comprendo otro modo de vida. He visto a miles de búfalos pudriéndose en las praderas, muertos a tiros por el hombre blanco desde un tren en marcha. Soy un salvaje y no comprendo cómo una máquina humeante puede importar más que el búfalo al que nosotros matamos sólo para sobrevivir[...]"- en 1854 a Frankli Pierce (a la sazón presidente de EEUU) es todo lo que un americano del norte de verdad ha dado como contribución al acervo cultural mundial.
Recojo el guante de tus recomendaciones como si fueran propias por supuesto y te emplazo para la próxima, aunque seguramente el tema se extenderá esta noche en el pub con unas birras de por medio.
Sin más:
El Lobezno
